Hermosillo, Sonora a 18 de octubre de 2023
Mi Carta de Hoy…
Remite: Alejandro Islas Galarza
¡Mujeres empoderadas, se agarran del chongo!
¡Hola, lector! La solemnidad protocolaria de la sesión del Congreso del Estado, anticipaba el reconocimiento y entrega de la presea al poderío de las mujeres sonorenses; en el área de butacas, invitados especiales de las galardonadas esperaban el inició de los trabajos legislativos, sin embargo, no todo fue miel sobre hojuelas… dos mujeres se liaron a golpes, como testimonio de su propio “empoderamiento”.
Me encontraba en la conferencia de prensa que, como todos los martes realiza Alfonso Durazo Montaño.
Ya casi estaba por terminar, cuando un colega me muestra un video desde su teléfono inteligente.
En el mismo se observa a la activista –que no periodista—social, mejor conocida como Mirta, confrontándose con otra dama que, después supe se trataba de Erika Llaguno, reportera de medio digital “Libera Radio”.
En el video se observa a varias personas con pancartas en protesta por las reformas al poder judicial.
Espere a que concluyera la conferencia de prensa del gobernador, quien por cierto exalto y con mucho la participación de la delegación sonorense en el Festival Internacional Cervantino.
Ponderando la presentación de la cultura sonorense en ese evento de corte internacional y del cual Sonora junto con Estados Unidos, fueron invitados especiales.
Le invito a visitar el portal de noticias www.micartadehoy.com en donde podrá encontrar toda la información que Alfonso Durazo, ofreció durante su comparecencia semanal ante los medios de comunicación so orenses.
Mientras tanto, continuamos con los pormenores del desgarriate que protagonizó la activista social Mirta y que puso en jaque el prestigio y honorabilidad que por siempre han acompañado al poder Legislativo.
Cualquiera podría pensar que se trató de un pleito de lavadero y cuyo origen, al parecer surgió de una serie de acusaciones por presuntos actos de “chayoterismo” de la activista social.
–Usted es una vergüenza para lo que dice que es, el oficio de la prensa, acusó Erika.
–A cada uno de los que están aquí y trienio tras trienio pidiendo dinero, insistió Erika.
Mirta, brava como es, exigió…
–Acredítalo y pruébalo, no nomas hables, fundamenta tu critica, fundamenta para que tengas como ir ante una procuraduría, no seas pendeja.
Mirta, se fue acercando a Erika quien en un descuido le arrebato el teléfono celular.
–¡Dámelo!, demandó Mirta…
–Ni madres, reviró Erika.
–¡Dámelo!, volvió a exigir Mirta.
Y entonces Erika, lanzó al vació el celular…
Ahí comenzó la historia…
Del primer round en la historia del poder legislativo, en el que dos mujeres “empoderadas” se agarran del chongo.
Ante una nutrida asistencia que habría acudido como invitada a la entrega de reconocimiento y presea del poderío de la mujer sonorense.
Pero que ignoraba que recibiría un espectáculo a modo de “pilón” por su asistencia.
Hago la pertinente aclaración que, todo lo escrito fue rescatado del video que comenzó a circular en redes sociales, antes que las protagonistas se dieran cuenta que había regado el tepache.
La contraparte de la solemnidad del reconocimiento y entrega de la presea al poderío de las mujeres en Sonora.
Y que correspondió recibir a:
María Soledad Durazo Barceló, Blanca Luz Saldaña, Rosario Margarita Vásquez Montaño, María Wendy Briseño Zuluaga, Guadalupe Hernández López, María Salguero Bañuelos, Martha Frías Armenta, Alma Lorena Alonso Valdivia, María Magdalena Rivera Carrillo.
Para entonces la Policía Municipal había tomado el control del desgarriate que protagonizo una mujer que dice ser periodista, pero que en realidad no lo es.
Degradación del periodismo encarnado en esa activista social.
Mientras tanto la diputada Ernestina Castro Valenzuela, me cometo en corto que van a implementar medidas que en un futuro eviten ese tipo de desagradables acontecimientos.
Lo de ayer fue un acto vergonzante para el periodismo en Sonora.
Urge una dignificación del gremio periodístico en Hermosillo.
Cualquiera puede ser periodista, sin serlo.
Basta con tener una cámara de video grabación, un celular o portal de noticias para justificar que se es periodista.
El espectáculo de ayer en el salón de pleno del Congreso del Estado, no debe repetirse.
No reconozco como periodista a la señora Mirta.
A Erika, apenas ayer la conocí.
Como colofón, dejo asentado que personal del propio Congreso del Estado, dice estar harto de la señora Mirta.
Sin bien, no celebraron el pleito a greña suelta, si por lo menos, manifestaron un sentimiento de agradecimiento.
A quien tuvo el valor de confrontar a ese polémico personaje.
A Mirta, se le apareció el diablo, encarnado en Erika Llaguno, reportera del medio digital Libera Radio.
¡Y se verán cosas peores!