¡El horno no está para bollos!

Hermosillo, Sonora a 4 de julio de 2024

Mi Carta de Hoy…

Remite: Alejandro Islas Galarza

¡El horno no está para bollos!

¡Hola, lector! La experiencia de abrir la llave del agua del lavamanos y que, de ésta, no salga ninguna gota, deja una gran lectura para quien, en este caso, su servilleta, –acostumbrado a que del grifo salga abundante agua—haya sentido la impotencia que miles de habitantes de Álamos, la viven desde hace décadas, pero que ayer, por fin, termino su viacrucis hídrico, al ponerse en operación el Acueducto Macoyahui-Álamos…

   La Posada de Don Andrés, testigo mudo de la experiencia de tener que soportar el tandeo, obligado por la falta de abasto de agua, que data desde hace más de 30 años en Álamos.

   Acudí al Pueblo Mágico, para atestiguar la inauguración del Acueducto Macoyahui-Álamos, que encabezó Alfonso Durazo Montaño.

   La noche del martes arribamos a la colonial Álamos.

   Tras el registro oficial en la Posada de Don Andrés, decidí realizar un paseo por las calles colindantes al hotel que esta frente a la Alameda central del Pueblo Mágico.

   Al salir el olor a tierra mojada ya permeaba, dándole a esa noche un matiz especial.

   Densas nubes ya arropaban el cielo de Álamos.

   Una llovizna tapizo de agua calles y callejones del Pueblo Mágico.

   Un fenómeno natural que sus habitantes aprovecharon saliendo a disfrutar la frescura del agua y ese natural olor a tierra mojada.

   Al amanecer del día siguiente, el miércoles 3 de julio, nos dimos cuenta que las nubes, al igual que su servilleta, pernoctaron en cielo alamense.

   Nubes que anticiparon a su arribo, lo que para entonces ya se sabía.

   Que por fin se vería resuelto el desabasto de agua que por décadas golpeo severamente a toda esa población.

   Y es que a media mañana Alfonso Durazo Montaño, encabezó la inauguración del Acueducto Macoyahui-Álamos.

   Una obra de infraestructura hídrica, mediante la cual se va a dotar de agua potable a todo el Pueblo Mágico de Álamos.

   Una obra por la cual se luchó por años.

   Administraciones municipales que habrían gestionado la solución a esa añeja problemática y cuya petición se quedó en el tintero administrativo de alguna oficina de gobierno.

   Y así pasaron las horas, los días, las semanas, los meses y los años.

   Sin embargo, los habitantes del Pueblo Mágico, aguantaron incólumes.

   Sabían que en alguna etapa se alcanzaría el ideal añorado.

   Y si, llegó al arribo de Andrés Manuel López Obrador, como presiente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.

   Y a quien en una de tantas giras que por Sonora ha realizado.

   El avezado presidente Municipal de Álamos, Víctor Balderrama, aprovechó un acercamiento que tuvo con Andrés Manuel.

   A quien le hizo ver la grave problemática que por falta de agua vivía Álamos.

   Petición que, sin más, el Presidente hizo suya, comprometiéndose a resolverla.

   Entrándole al quite el propio Alonso Durazo y su equipo de trabajo en materia hídrica.

   La obra hidráulica a la que gobiernos anteriores desdeñaron.

   Hoy ya es una realidad, sin ocuparse tanto tiempo en ejecutarla.

   Porque Andrés Manuel, mostró voluntad política, la misma que aportó Alfonso y que junto con el Alcalde, se logró esa importante obra hídrica.

   A la que se le invirtieron 97 millones de pesos.

   Incluida la participación porcentual del fondo minero.

   Recursos estatales y municipales.

   La imagen en la que Alfonso Durazo, manipula el grifo que abrió la válvula por donde se esparcieron los primeros chorros de agua, quedo inscrita en la historia de ese Pueblo Mágico de Álamos.

   Sus cerca de diez mil habitantes en lo sucesivo ya no tendrán desabasto de agua.

   Pero si, habrán de impulsar una gran campaña de cultura sobre el cuidado del vital líquido.

   Y si alguien que lo sabe, son los propios habitantes, quienes debieron someterse a los indeseables y recurrentes tandeos que por años los sometió.

   La visión de Alfonso, respecto a atender y solucionar problemas añejos y en comunidades en donde nunca fueron beneficiarios de los programas gubernamentales del pasado.

   Marca la nueva política de atender a los que fueron ignorados sistemáticamente en el pasado.

   En hora buena por Álamos, por sus habitantes que ya ven un promisorio futuro en sus vidas.

   La dotación de agua que habrá de detonar la vida social, política y económica de la región.

   La fórmula mágica de este proyecto es simple.

   Andrés Manuel y Alfonso, son dos gobernantes socialmente comprometidos.

   Así de simple, así de sencillo.

   Felicidades por esa magna obra.

   No dejare pasar el comentario sobre el mensaje político que Alfonso Durazo, aprovecho dejar durante el acto ceremonial de la inauguración de esa importante obra hidráulica.

   Alfonso habló del proceso electoral del 2 de junio.

   Específicamente del caso Hermosillo.

   Cuyo resultado electoral fue impugnado por María Dolores del Río.

   En su legal derecho, solicito el recuento de votos, con el propósito de transparentarlo y que sean las autoridades electorales las que finalmente decidan quien gano y quien perdió.

   No sobre la base de quien de los dos candidatos obtuvo más votos.

   Sino sobre las inconsistencias que se han detectado.

   Un argumento legal que podría tumbar la elección y convocar a un nuevo proceso.

   El derecho al pataleo de la hasta el momento, la candidata perdedora.

   Pero bueno, mas allá de mi argumentación sobre el particular.

   Le comparto lo dicho ayer por el propio Alfonso.

–Yo soy parte de un movimiento, me siento orgulloso de ser morenista, pero antes de ser morenista, soy demócrata, soy sonorense y yo como demócrata y como sonorense, respeto la decisión que toma la genta. Claro que yo preferiría el triunfo como cualquier militante de su propio partido, del triunfo de un compañero o una compañera de filas, pero por encima de ello está la responsabilidad que tenemos de respetar la decisión de la gente, porque coincidiendo con el presidente López Obrador quiero decirles a ustedes que el pueblo es sabio, que el pueblo no se equivoca y si se equivoca vuelve a mandar; por eso respeto yo la decisión, no solo que ustedes tomaron aquí en Álamos, sino la que tomaron en cualquier municipio del estado.

   Palabras textuales.

   Saque usted sus propias conclusiones.

   Durazo le dio seguimiento al tema, durante una entrevista de “banqueta” y esto dijo…

–Lo que si debo reconocer es que haya un ánimo de todas las partes involucradas en este proceso, por transparentar lo más posible los resultados de una elección porque eso va a dejar mejor satisfechos a todos los participantes, a quien haya ganado, a quien haya perdido.

   Despejar dudas, de quien ganó y quien perdió.

   ¿Mensaje para María Dolores del Río?

   ¿Mensaje para Toño Astiazarán?

   Lo cierto es que la judicialización del proceso electoral en Hermosillo.

   A Alfonso, le está provocando fuertes “dolores” de cabeza.

   Digo, lo mejor es darle la vuelta a la página.

   Haya perdido, quien haya perdido.

   Haya ganado, quien haya ganado.

   El horno no está para bollos.

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