Hermosillo, Sonora a 11 de agosto del 2023
Mi Carta de Hoy…
Remite: Alejandro Islas Galarza
¿Para qué?
¡Hola, lector! Que los diputados de la fracción parlamentaria de MORENA, del Congreso del Estado, respalden las acciones de gobierno que impulsa Alfonso Durazo Montaño, es bueno y se vale, pero de eso a que le agradezcan programar obras de infraestructura urbana a 19 municipios de la entidad, enmarcados dentro de los distritos electorales que ellos representan, fue más un posicionamiento de adulación legislativa.
Que el propio Alfonso, no necesita.
Pues ha sido él mismo, quien se ha manifestado en contra del “incienso” y la adulación.
Ciertamente fueron los legisladores que, en diciembre del año pasado aprobaron el crédito a corto plazo por dos mil 100 millones de pesos que el propio Alfonso Durazo, remitió a la soberanía legislativa.
Es por ello que el gobernador ha expresado su agradecimiento a los diputados por haber aprobado la solicitud crediticia.
Hasta ahí todo bien.
Incluido el posicionamiento de los legisladores de la 4t.
Por supuesto el de la coordinadora parlamentaria, Ernestina Castro Valenzuela.
Y lo que comenzó por ser un posicionamiento de respaldo a la obra del gobierno del estado.
Se convirtió en una pasarela de adulación.
Pues cada uno de los diputados representativos a los distritos electorales de cada demarcación municipal.
Agradeció la generosidad del propio Durazo.
Por escoger a su municipio y disponer de obras de infraestructura urbana.
Se desbordaron en halagos.
Pues advirtieron que, en algunos casos, se trata de obras “históricas”, una discursiva retórica, pues sexenio tras sexenio es utilizado ese término.
Y sí, habrá casos excepcionales.
El punto es que efectivamente se ejecutarán obras de infraestructura urbana importantes, con recursos económicos obtenidos vía un financiamiento bancario y que será cubierto antes de que concluya la actual administración.
Entre las obras de mayor impacto, están las de Nogales y Agua Prieta.
Pues van a resolver problemas de corrientes de aguas pluviales que efectivamente históricamente han provocado severos daños a las poblaciones de ambos municipios.
A los diputados se les olvido que esos recursos económicos son producto de un crédito.
Y cuya deuda será cubierta con recursos públicos.
Es decir, con recursos de los sonorenses que año con año, acuden responsablemente a realizar el pago puntual de sus contribuciones fiscales.
Puesto que a veces, se siembra la percepción de que es el propio gobierno del estado, quien cubre el costo de las obras de infraestructura.
Tal vez se debería agregar al discurso institucional, el reconocimiento a la sociedad que al través del pago de sus contribuciones se hacen posibles las obras gubernamentales.
En todo caso, el reconocimiento al gobernador es por elegir y determinar qué tipo de obra y en qué lugar se va a llevar a cabo.
Atendiendo siempre la prioridad de ir hacia los sectores más vulnerables de la sociedad.
Las zonas, poblaciones y municipios más marginados.
Aquellos sectores a los que nunca se les volteo a ver.
Ahí sí, todo el reconocimiento al gobernador.
Pues es este, uno de los principios fundamentales de la Cuarta Transformación.
En ese tenor, bien vale la pena darle todo el reconocimiento al inquilino de la oficina refrigerada de Palacio de Gobierno.
En términos generales, la comparecencia de los legisladores de MORENA ante los medios de comunicación, fue más de protagonismo.
Dudo que al gobernador le haga falta.
Pero bueno, cada quien con su cada cual.
De la sesión de preguntas y respuestas poco de qué hablar.
La mayoría expuestas a modo de una “magistral” respuesta.
Alguien puso en esa agenda mediática el nombre de los diputados Natalia Rivera y Ernesto de Lucas.
Quienes un día antes, habrían acusado al gobernador de mentir.
En un tema que tiene que ver con la casa de gobierno.
La diputada Ernestina Castro, dio respuesta…
–A Natalia Rivera le paso de noche todas las propiedades de gobierno que se vendieron en la administración pasada, sigue siendo una priista a pesar de estar en Movimiento Ciudadano.
No muy separadas de la propia Ernestina, se encontraban las diputadas Ely Sallard y Karina Zarate.
¿Se refirió a ellas por igual la diputada Castro Valenzuela?
No me ayudes comadre, debieron pensar las también ex priistas.